
Rusia desafía el dominio marítimo occidental y la OTAN en alerta: ‘Estamos resistiendo, pero no por mucho tiempo’
El Atlántico Norte, tradicional bastión del poder naval occidental, comienza a mostrar signos de vulnerabilidad ante la creciente actividad de Rusia en la región. A medida que las rutas marítimas entre América y Europa se ven cada vez más amenazadas, la alerta se enciende en las fuerzas armadas del Reino Unido.
El general Sir Gwyn Jenkins, jefe de la Marina Real británica, ha expresado su preocupación en un reciente discurso en Londres, advirtiendo que la ventaja estratégica occidental está en riesgo. La presencia de buques rusos ha aumentado en un 30% en los últimos dos años, lo que ha llevado a la Royal Navy a interceptar embarcaciones de origen moscovita con frecuencia. ‘Estamos aguantando, pero no mucho’, resaltó Jenkins, subrayando que la era de la superioridad naval occidental, considerada un hecho consumado durante décadas, está en peligro. Este cambio geopolítico se evidencia claramente con el avistamiento de buques de inteligencia rusos, como el Yantar, que han realizado acciones provocativas, incluyendo el apuntar con láseres a aeronaves británicas. Mientras tanto, la amenaza subyacente de la flota de submarinos rusos, altamente capacitada para operar en condiciones extremas, se cierne sobre el corredor estratégico entre Groenlandia, Islandia y el Reino Unido, intensificando las preocupaciones sobre la seguridad marítima en la región.